lunes, 2 de diciembre de 2013

Fué en octubre...

La historia de Guatemala tiene en el mes de octubre huellas muy importantes que año con año se conmemoran.
Tristemente el octubre del año 2012 sumó una más, pero así... una huella triste. 

También es triste que un año después, muchas personas hayan olvidado lo que ocurrió aquel jueves 4 de octubre al medio día, en la cumbre de Alaska, sobre la carretera interamericana. Puedo decir que me consta el olvido (que no quisiera que fuera generalizado), en el que cayó para mucha gente, la matanza perpetrada por el ejercito de Guatemala contra pobladores de Totonicapán, que convocados por los "48 Cantones" se dispusieron a protestar ese día, bloqueando el paso de vehículos en aquel punto de la carretera. 
Que me consta el olvido digo, porque con numerosas personas lo comenté antes de octubre del 2013 y durante ese mes, tratando de "sondear" qué se recordaba de aquello y también contándoles que estaba preparando un "concierto" para conmemorar esa huella triste en nuestro camino, y fueron pocas las que mostraron claramente que lo recordaban. Ni modo... "aquí todo el pueblo olvida".

¿Qué protestaba la gente de Totonicapán aquél día? varias cosas: El costo de la electricidad, el creciente número de minas con más daño que beneficio para el país, y en general todas las injusticias que mantienen en la pobreza a la mayoría de la población guatemalteca y que además detienen el "proceso de desarrollo" de nuestro país. La gente de Totonicapán se tomó la tarea de reclamar a nombre de todos, lo que los demás callamos... la consecuencia fué tremenda! 
Pero bueno, mucho se dijo de todo eso las semanas siguientes al suceso...

A medida que pasa el tiempo, lo mas terrible no es la muerte en sí misma, sino el olvido... quien no recuerda donde tropezó, lo volverá a hacer.

En este blog escribí el 21 de octubre del 2012, la nota que se llama "Totonicapán (Chuimekená)", que se puede leer en este enlace, para no olvidar...:
                     http://otonielmoraysusaltibajos.blogspot.com/2012_10_01_archive.html

También escribí en febrero del 2013 esta otra, llamada "48 cantones", que espero que usted pueda leer:
                 http://otonielmoraysusaltibajos.blogspot.com/2013/02/05-totonicapan-otoniel-mora1.html

En esta nota de hoy quiero comentar -a más de 30 días después- el concierto que me dí a la tarea de organizar, junto a los 48 Cantones, en particular con la Presidenta de la Junta de Recursos Naturales, Andrea Ixchiú y el colectivo K'astajinem (que no solo han cumplido fielmente con la tarea que la organización comunitaria les ha encomendado -celebrando por ejemplo "El Mes Verde", durante agosto del 2013-, sino que además no han cesado en sus esfuerzos por evitar que la Memoria Popular deje en el olvido el 4 de octubre del 2012).



Así que esta es una "crónica tardía" de cómo nació y cómo fué el "Concierto Conmemorativo" de la masacre del 4 de octubre, en Alaska.

Bueno... esta historia empezó el 4 de octubre del 2012, porque a partir de lo ocurrido escribí mi canción "Totonicapán", que recuerdo compuse durante el sábado 20 y domingo 21 de octubre del 12. El mismo domingo por la tarde-noche hice la grabación en mi casa, y cuando estuvo terminada la envié por correo electrónico a la casa de Andrea... digo "a la casa de Andrea", porque sé que la canción fué escuchada por su familia, con las emociones que todo eso pudo generar aquella noche.

Esta es mi canción "Totonicapán":



En las semanas siguientes al 4 de octubre, se realizaron en Totonicapán varias actividades relacionadas, y para el sábado 28 de octubre se programó en el Parque del lugar, una concentración para manifestar el repudio por lo ocurrido. Andrea me invitó a estar en la actividad y asistí, cargando con mi canción, para cantarla en solidaridad con el pueblo de Chuimekená. Recuerdo que participaron varios artistas locales y también mis amigas de "Naik Madera". 

Luego pasaron varios meses y al acercarse el aniversario del 4 de octubre, hablamos Andrea y yo de la posibilidad de hacer un concierto para conmemorar la triste fecha. La idea me emocionó mucho y empecé a "mover pitas" para organizarlo, mientras Andrea hacía lo propio desde Totonicapán. 

Le propuse a Fernando Juárez (mi amigo músico, flautista, saxofonista, etc.) que fuera parte del concierto, a lo que accedió inmediatamente. Contaba -sin preguntarle- con Gabriel Rodríguez (percusionista). Fernando me sugirió el nombre de otros varios músicos y gente de sonido y esas cosas, para que participaran en el concierto. Yo preferí irme por el lado de los músicos más conocidos para mí y con quienes me une la amistad desde tiempo atrás. Así hablé con Danilo Rodríguez (pianista y arreglista), con Estuardo Tomás (bajista) y con Juan Carlos Godínez (saxofonista y flautista). De todos obtuve respuesta positiva y buena vibra! Fernando Juárez finalmente no pudo participar por asuntos familiares, pero se incorporó Edson Rodríguez (hijo, de mi amigo Edson Rodríguez), para hacer su debut como "percusionista menor".


Danilo Rodríguez al piano (Director Musical) y Edson Rodríguez a la percusión menor.

Estuardo Tomás, al bajo; Juan Carlos Godínez a la flauta y el saxo; Gabriel Rodríguez a la batería.
Debo decir que no fué fácil encontrar el tiempo para que todos los músicos coincidiéramos para estudiar y ensayar las canciones que conformarían el concierto. Habría que prever el lugar para ensayar, varios desvelos y complicaciones de ese tipo, pero finalmente logramos "montar" las 10 canciones que cantaríamos:
  1. Yo vengo a ofrecer mi corazón, de Fito Páez.
  2. Comunicado, de Otto René Castillo y Fernando López.
  3. Cosas Serias, de Otoniel Mora
  4. Canto de la Calle, de Otoniel Mora (dedicada a la niñez que vive en la calle)
  5. Hojarasca, de Otoniel Mora (dedicada a los viejos, a los abuelos)
  6. El Blues del Desengaño, de Otoniel Mora (pensando en la historia de Guatemala)
  7. Elemental, de Otoniel Mora (dedicada a la mujer)
  8. Oración al Maíz, de Otoniel Mora (una petición al Maíz)
  9. Totonicapán, de Otoniel Mora (recordando lo ocurrido el 4 de octubre del 2012)
  10. No más Lágrimas (una invitación a ver hacia el futuro...)
Luego se presentó otro tipo de complicaciones...

Inicialmente Andrea me había propuesto que el concierto fuera el propio 4 de octubre, para que la conmemoración fuera al año exacto. El 4 sería un día viernes, por lo que difícilmente podríamos disponer del tiempo suficiente (los músicos), así que acordamos que la mejor fecha sería el sábado 12 de octubre, que además coincidiría entonces con el "día de la hispanidad" y esas otras cosas. Todo se preparó para esa fecha y así lo anunciamos.
Sin embargo, la semana previa al sábado 12, Andrea me comunicó que se las autoridades responsables de la administración del Teatro Municipal, en que se realizaría el concierto, de forma inexplicable lo habían cedido para otra actividad (un congreso de pastores evangélicos!). Eso impedía definitivamente la realización del concierto, a pesar de su programación y formalización del uso del Teatro. En realidad eso puede leerse como la intención real de evitar que el concierto se hiciera. 
Pero bueno, las opciones eran buscar otro espacio u otra fecha para hacer el concierto y nos inclinamos por cambiar la fecha: lo trasladamos para el sábado 26 de octubre del 2013. 


Anuncio publicado en las redes sociales.
Fachada del Teatro Municipal de Totonicapán.
El día del concierto "curiosamente" también se había programado un ruidoso evento musical cristiano, en el que el plato fuerte era el "rap", y todo estaba instalado precisamente al frente del Teatro Municipal, como para invitar a la gente a quedarse fuera del Teatro o para que el estridente ruido entorpeciera el sonido del Teatro. Ni modo, para mí resultó evidente que algo raro pasaba... pero lo más importante es que finalmente hicimos el concierto!


Aroldo Gonón, poeta.

En días previos a la primera fecha programada (el 12 de octubre), Aroldo Gonón, del Colectivo Artístico de San Cristóbal Totonicapán, "Chichicaste", me dijo, cuando le conté que estaba preparando el concierto, que le interesaba poder leer algunos de sus poemas en un evento como ese, poemas que había escrito también, a partir de la misma matanza de Alaska. Así que le prometí que al inicio del concierto lo podría hacer. 
Con los cambios de fecha, Aroldo sufrió también los inconvenientes.

A la derecha una imagen de Aroldo Gonón, al inicio del concierto y abajo se puede escuchar uno de sus poemas.



Las viudas e hijos/as de las víctimas del 4 de octubre del 2012, estuvieron presentes en el Teatro Municipal, convocadas por K'astajinem (aparece una foto abajo), que no dejaron de mostrar sus emociones, su tristeza, su rabia... sus contradicciones... 
Familiares de las víctimas de la masacre de Alaska, del 4 de octubre del 2012
Por ellas, por las familias de las víctimas, quiero dejar acá el nombre de las personas que murieron en esa masacre:
  1. Francisco Puac Ordóñez, de Chipuac.
  2. José Eusebio Puac Barreno, de Chipuac.
  3. Jesús Baltazar Caxac Puac, de Chipuac.
  4. Santos Nicolás Hernández Menchú, de Pasajoc.
  5. Rafaél Nicolás Batz Menchú, de Pasajoc.
  6. Arturo Félix Sapón Yax, de Panquix.
  7. 19 personas heridas.
Una persona más, desapareció el día de la masacre y apareció muerta varios días después. Su familia quiso no mencionar su nombre. 



Nombrando a las víctimas...
En el audio que sigue se escucha el momento en que nombré durante el concierto a las personas fallecidas...


Terminamos el concierto con una invitación a ver hacia el futuro, sin olvidar el pasado... mi canción "No más lágrimas" que se puede escuchar a continuación:




Quiero decir también que no fué fácil cantar en aquel momento. Muchas emociones se cruzaban dentro mío... recordaba cuando escuchaba la noticia en la radio, en el preciso momento en que estaba ocurriendo la masacre en Alaska, aquel 4 de octubre del 12... recordaba el día que canté en el Parque de Totonicapán... podía ver los rostros de las viudas, que mostraban su tristeza y su rabia por lo ocurrido, mientras yo cantaba y tenían por momentos su mirada hacia la nada...

Espero que esto sea una contribución para que la memoria del pueblo olvide menos y construya más...

Para mí fué una experiencia única, que por supuesto no quisiera repetir por un motivo como este. Fue un encuentro grande con la vida, quizá también con la muerte, con los recuerdos, con la esperanza, con el dolor, con la humildad de la gente herida, y creo que también fué un encuentro conmigo mismo, porque haber pasado por esto me llena de una sensación muy franca de solidaridad con el pueblo de Totonicapán y amor por la vida. Estoy felíz de haber podido hacer este concierto y de pagar con ello un poco de lo que la vida me ha dejado vivir. 

¡Gracias a la vida!


Durante el concierto pude recordar con el público algunas cosas importantes que han ocurrido en octubre... el mismo día de la masacre, el 4 de octubre nació la Cantora Universal Violeta Parra, en Chile... el 4 de octubre murió la Cantora Argentina Mercedes Sosa... y el mismo 26 de octubre, en que estábamos realizando el concierto pudimos aplaudir por ¡el cumpleaños de Evo Morales, Presidente de Bolivia!

Mi familia me acompañó esa noche... muchas gracias mis amores!
Por supuesto estaba también la familia de Andrea Ixchiú, sé que para ellos/as todo esto es muy importante. 
Entre el público pude saludar a los escritores Hugo Gordillo y Nelton Santiago y a mi amiga Ericka Cacao. Gracias por su solidaridad y compañía!
Recibiendo al final, un reconocimiento de K'astajinem 

Quiero agradecer para terminar, a los músicos que se embarcaron conmigo en esta tarea, esperando que igual que yo, estén satisfechos de lo cumplido. También muchas gracias a Pablo Prado, que se encargó del sonido.



Un par de días antes de terminar esta nota (que dicho sea de paso es la que más tiempo he tardado en escribir...), recibí de Andrea Ixchiú y de Pedro Ixchiú (su papá y abogado de las víctimas) una noticia muy importante y alentadora, que ellos darán a conocer de un momento a otro, por lo que también dedico estas letras al esfuerzo que hace Pedro Ixchiú en toda esta historia. Salú Pedro!

Para terminar dejo acá el video que Gloria Wellman preparó sobre mi canción Totonicapán.




- - - - - - - - - - - -



Pudimos hacer el registro del audio del concierto, por lo que si a alguien le interesa póngase en contacto conmigo.


Salú!

martes, 6 de agosto de 2013

Fotos Viejas...

Simplemente varias fotos que he ido encontrando, a medida que remuevo mis alborotos del pasado... (creo que logré ponerlas en orden cronológico...)


El día de la primera comunión, estudiando en la escuela de curas "San Juan Bosco",
en Xela, Guatemala. Me costó un montón encontrarme entre tanto fulano...
"...y casi me hago cura"
Esto fué entre 1973 y 1975.
Con el grupo de marimbistas del Instituto Técnico de Agricultura,
Bárcena, Villa Nueva.
Fue durante un concurso de marimbas escolares que organizaba Paiz,
seguramente en el año 1982.
Están: Candelario Ramos (que ya no se llama Candelario), el "Chucho" Rodas,
"Sangre" Canek, el "Tieso" Cantoral, Güichín Sandoval,
Otto Cabrera Cortéz (EPD), "Radar" Villeda Lemus y yo agachado (Otoniel Mora).



Con el Grupo Kenchas (Kenas, Charango y Zampoñas)
pienso que fué entre 1996 y 1998.
Es una foto del disco "Llanuras".
En 1992, durante un viaje de trabajo/estudios a Costa Rica
conocí a los integrantes del grupo chileno Inti Illimani
(que volvían a América después de su exilio de 20 años en Europa).
En la fotografía estoy con Horacio Salinas, su director musical,
que hoy es director musical de Inti Illimani Histórico
(después de los líos internos de Inti Illimani).
Estamos en el Teatro "Melico Salazar" de San José Costa Rica.
Horacio Salinas es un guitarrista "de altos vuelos" y clase mundial
¡esta foto es un maravilloso recuerdo para mí!
(Nótese que los dos teníamos bastante más pelo que hoy!)


Trova Tres: Fernando López, Fernando Juárez y Otoniel Mora.
Quizá por el 2008, en Royal París. 

Trova Tres: Fernando López, Fernando Juárez y Otoniel Mora.
Pienso que en el 2008, en La Luna, Xela.
De Trovador... Cantando mi canción "No más Lágrimas"
para las víctimas del CUNOC durante el conflicto armado interno.
Fue en enero del 2007.


Alguna vez en el Proyecto Lingüístico Quetzalteco,
seguramente en el mes de noviembre... a donde he acudido a cantar
casi todos los años... quizá fué en el 2010.
Alguna vez en el Royal París... con la guitarra esquelética
de Fernando Juárez y mi esbelta panza...
(mi panza y esa guitarra me dicen que eso fué después del 2010)

Este es el rótulo que estaba a la entrada del Café RED,
que anunciaba que yo cantaría el siguiente sábado por la noche...
Creo que era entre el 2011 y el 2012.

Con los Altibajos: René Morales y Gabriel Rodríguez, en el Café RED, de Xela.
Entre 2011 y 2012.

En el parque de Totonicapán, en octubre del 2012,
cantando luego de la masacre de Alaska...

En la "Casa de Don Memo", en Sololá, en el 2013
(esta no es una foto vieja!) 
Esta no es una foto vieja... pero sí es una Vieja Amistad!
Estoy con Fernando López
al final de su concierto del viernes 19 de julio del 2013
antes de que él viajara a Europa...

Tocando el bajo con el Grupo Caudal...
En Xela, quizá por el año 2000.
Se ve en la foto a Amílcar y
 Juan Carlos Godínez.
Salú!

 ... y si encuentro más, las pongo!

domingo, 28 de julio de 2013

Doña Hilda: MI MAMÁ!!

Doña Hilda.
(foto de hace algunos años, después del 2000)
Era 1923, es decir, el primer cuarto del siglo pasado...

El lugar era Santo Tomás la Unión, Suchitepéquez, en el sur-occidente de Guatemala, un pueblo rural, en la zona cafetalera del país. La familia estaba formada por un alemán (llegado en condición de retirado, a vivir y a hacer una segunda vida) y una mujer guatemalteca, dispuesta a la vida... 

El alemán era mi abuelo... se llamaba Henrich Adalberth Herwig Fulrrot (jeje! cuesta pronunciar todo eso! por eso le decían "papá Beto"). La mujer era mi abuela... se llamaba María Leonor Benavente Muñoz (mamá Nosh). Mi mamá es la número 5, en esta lista de hijos de aquellos dos que decidieron hacer familia:

1. José Rodolfo, 2. José Adalberto (se llamaban José los dos, por haber nacido el día de San José), 3. Marta Alicia, 4. Edgar Enrique (el tío "Checo", que murió en marzo del 2013, a los 92 años, y era el último hermano de mi mamá que estaba vivo), 5. Carmen Hilda (mi Mamá), y 6. Elfa Marina. 


Mi mamá nació y creció en Santo Tomás la Unión, Suchitepéquez, el 7 de julio de 1923. La nombraron Carmen Hilda Herwig Benavente y desde aquella fecha hasta el 7 de julio del 2013, se suman 90 años de vida! 
Esa es la edad de mi mamá!
Santo Tomás la Unión, Suchitepéquez, en Guatemala, Centro América.
A lo largo de sus 90 años mi mamá ha vivido tantas cosas, que sentarse a escucharla una tarde cualquiera, resulta llena de anécdotas y vivencias, todas ilustradas con tantísimos detalles, que es fácil imaginar la vida en Santo Tomás y todo lo que había y pasaba... "la casona y su corredor... las gradas hacia la cocina... el patión para secar café... la leña... el taller de mecánica del abuelo, donde hacía pulperos para café, que vendía a "los Xancas" (lo caficultores de las aldeas de Nahualá, Pasacul, Xejuyup y otras, que son aledañas a Santo Tomás)..."    

Mamá recuerda por qué el abuelo siendo alemán se instaló en Santo Tomás para iniciar una nueva vida: "mi papá era apicultor en su tierra y luego mecánico de barcos, de donde logró salvarse cuando el barco fué hundido durante la guerra, así llegó a Guatemala... cerca de Santo Tomás se habían instalado varios alemanes que se habían convertido en caficultores, en la finca Chocolá y otras... En Santo Tomás, "papá Beto (mi abuelo)" siguió con su oficio de apicultor, donde llegó a tener 300 colmenas, que producían toneles de miel que se enviaban a la capital y luego al extranjero..." 

Mi abuela "mama Nosh" nació en una finca ubicada entre "El Marne" y "Filadelfia", dos fincas localizadas en el municipio de Chicacao, Suchitepéquez. El nombre del lugar ya no lo recuerda mamá, pero sí imagina que "papá Beto", en sus andanzas de soltero por aquellos caminos rurales, encontró a "mamá Nosh", con quien hizo vida en Santo Tomás la Unión. 


Mi papá y mi mamá,
en el Parque Benito Juárez de Xela.
A sus espaldas está el Calendario Azteca
y monumento a Benito Juárez.
¿cuándo? no sé...
Mamá fué a la escuela primaria en Santo Tomás y su vida transcurrió de forma tranquila, como se vive en un pueblo pequeño. Relacionada con las tareas de la casa y con la vida del abuelo (que entonces se fué convirtiendo en un enojón!), fué haciéndose mujer y preparándose para lo que la vida le propusiera paso a paso...
En su adolescencia conoció a Juan Héctor Mora Avila (mi papá, 8 años mayor que ella), que llegó al pueblo desde Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla, cuando su papá, don Juan Mora Salazar se instaló allí para trabajar como telegrafista. Se conocieron y se enamoraron y de esa unión nacimos nueve hijos.   Papá y mamá vivieron juntos hasta que papá murió en 1971, a los 56 años, de leucemia, en aquella época incurable.

Papá trabajó en varias fincas de la boca-costa de Suchitepéquez, administrando la producción de café. Mientras tanto mi mamá fué una mujer entregada a su familia, a la casa y a la vida.
Como familia vivieron en diferentes sitios, por diferentes temporadas, por eso mis 8 hermanos (yo soy el número 9), fueron naciendo igualmente, en lugares diferentes. Yo nací en Santo Tomás la Unión, digamos que cuando volvían al "punto de inicio", porque mi hermana mayor nació también en ese lugar.

En 1967, cuando mis hermanos estaban alcanzando la educación media se hizo necesario para mi familia trasladarse a un lugar que ofreciera esas oportunidades. Así decidieron instalarse en Xela (Quetzaltenango). Yo tenía 2 años de vida (todo lo que cuento de esa época, me lo contaron o lo escuché alguna vez).

Esa no fué una época fácil, requirió mucho sacrificio, sobre todo de mi mamá, que cargó con el montón de hijos hacia Xela, mientras mi papá continuaba su trabajo en alguna finca de la costa sur del país. Recuerdo que entonces, papá logró encontrar trabajo cerca de Xela, en el Molino San Carlos (molino de trigo), de San Carlos Sija, y se trasladó para allá. Eso seguramente era mejor, aunque San Carlos de todos modos estaba lejos de Xela, sobre todo con dificultades de acceso. Pero así continuó la vida...

Creo que en 1970 mi papá empezó a sufrir el ataque del cáncer que lo mató... hasta que murió en marzo de 1971. Recuerdo el llanto de mi mamá cuando papá murió, aunque para mí todo eso no era muy claro en aquel momento (cuando tenía yo 5 años), hoy puedo asegurar que soy capaz de "escuchar" en mi mente su llanto, doloroso, profundo y agudo...  La muerte de papá fué un golpe terrible para mi mamá, que desde entonces cumplió para mis hermanos y para mí, la doble función de mamá y papá...


Una foto en blanco y negro de mi mamá,
que un fotógrafo decidió poner "en colores"
con una técnica rudimentaria de los años 70's
(pintándola a mano...)
Recuerdo que mi mamá logró mantener en pié la casa y la familia con un duro trabajo atendiendo a jóvenes pensionistas que se hospedaban en la casa de mi familia, para estudiar o trabajar. Mi mamá hizo el trabajo de ofrecerles un hospedaje adecuado, alimentación, e incluso representación en los centros de estudios donde estuvieran. También recuerdo haber visto a mis hermanas ayudar en esas arduas tareas, especialmente a mi hermana Esperanza. Yo mientras tanto crecía... 

Mi mamá se aseguró de que todos sus hijos/as tuvieran acceso a la escuela, a una educación digna, aún y cuando eso requirió de ella, largas jornadas de trabajo y profundos sacrificios económicos.

Lo que mi familia es y ha sido, mis hermanos y yo, es el resultado de la carga que mi mamá ha llevado en su espalda durante más de la mitad de su vida... cuando papá murió, ella tenía 48 años... casi la edad que tengo yo hoy! quién sabe qué vida habríamos tenido nosotros/as si ella no hubiera hecho los sacrificios que hizo, pero sobre todo, si no hubiera tenido la visión y la ilusión sobre cada uno de sus hijos/as, que la empujó a empujarnos! 
Desde que yo tengo conciencia de lo que significa haberse quedado sin su pareja durante tantos años de su vida, me tomé el compromiso de saludarla y agradecerle cuando se celebra el "día del padre" como cuando se celebra el "día de la madre" y en su cumpleaños, por supuesto. 

Pero por todo lo que significa su vida doña Hilda...


¡No alcanza ningún agradecimiento para lo que usted ha hecho por nosotros, MAMÁ!

Estos somos sus hijos: 1. Hilda Leonor, 2. Héctor Francisco (EPD), 3. René Guillermo, 4. Hugo Leobardo, 5. Olga Guadalupe, 6. Delma Esperanza, 7. Rodolfo Arnoldo, 8. Dora Norberta, y 9. Rolando Otoniel (yo). 
No sé el año, pero la foto es de un día de cumpleaños de mamá.
Estamos todos sus hijos: Leonor, René, Lupe, Hugo, Paco,
Esperanza, Dora, Rodolfo y yo.
(por mi cara de güiro, esto fué hace muchos años!)
Hoy día, mi mamá suma 26 nietos/as, 17 bisnietos/as y una tataranieta! (yo no tengo una foto donde quepan todos!). ¿hasta dónde llegará la vida?
Ya las ramas de esta familia alcanzan muchos sitios, muchas vidas y pienso que también muchas esperanzas e ilusiones... "el familión" que viene de doña Hilda crece y crece...
Mi Mamá
Foto anterior al año 2000

Resulta increíble (y no lo digo yo, sino mucha gente que la conoce) ver la energía con que mi mamá ha vivido todos sus años, aún ahora que suma nueve décadas! Parece incansable!  Desde hace años instaló una tienda en su casa, desde la que ha sostenido económicamente su vida, porque además, siempre quiso ser "independiente" y vivir sola, sin estar en casa de alguno de sus hijos/as. Siempre la he considerado una mujer muy determinada y segura de sí misma, seguramente por todo lo que la vida le ha exigido...

Hace un par de años, la muerte de mi hermano Paco fué otro golpe muy duro que recibió de la vida... sin embargo, mi mamá sigue de pié, encontrando razones para seguir dándonos lo que necesitamos, directamente a nosotros sus hijos/as o a través de nuestros hijos (sus nietos, o bisnietos...). Siempre, siempre, en casa de mi mamá se encuentra la energía que nos hace recomenzar...


Mi mamá, en julio del 2013
Hace años, en 1985, escribí y compuse la canción que aparece abajo, para doña Hilda. Creo que fué con la primera guitarra que tuve, y que compró para mí doña Hilda... Eso lo recuerdo claramente: Un día de tantos me dijo "vamos a Huehuetenango, a comprarte una guitarra para que dejés de pedirle prestada su guitarra a Don Maco" (don Maco era un músico cristiano, que creo que quería que yo me hiciera a su religión y por eso me dejaba usar su guitarra, con la que aprendí un montón...). Nos fuimos a Huehuetenango y volvimos con la guitarra que me acompañó en los primeros años de guitarrista, cuando mi edad rondaba los 12 años...

Mi Viejita

Texto y Música: Otoniel Mora

Mayo de 1985



En mi vida vive una mujer
De pelo blanco y piel cansada
De dulce vientre, tierna
Y siempre sincera
De mirar triste y soñador

Cada día nuevo es un caudal
De ilusiones y esperanzas
De risa franca, llanto
Y sentimiento
Todo relleno de valor

Que no se apague su luz
Que no deje de brillar
Porque mi vida alimenta
Con su triste palpitar

Que no se apague su luz
Porque su vida es manantial
De la riqueza que llevo
Cuando me empuja a caminar
Con su voz gastada por la vida
Con su pecho lleno de calor
Me enseño a sentir todo
Lo que ella siente
Este amor que ahora puedo dar

Caminando siempre a mi lado
Ocultando siempre su dolor
Sin limitaciones dice
"vamos adelante!”
Su sacrificio es mi valor
  
Que no se apague su luz
Que no deje de brillar
Porque mi vida alimenta
Con su triste palpitar

Que no se apague su luz
Porque su vida es manantial
De la riqueza que llevo
Cuando me empuja a caminar


Mi mamá y mi hija Daniela. Julio del 2013
Más adelante, en el mismo año 1985, conocí gracias a mi amigo Fernando López, los textos y poesía de Marco Aurelio Alveño. En el libro "Versos libres del ideal permanente" encontré este que se llama "Voces del Alma" y lo musicalicé, también para mi mamá.

Voces del Alma 
Texto: Marco Aurelio Alveño
Música y adaptación: Otoniel Mora
20 de septiembre de 1985


He plantado en mi huerto
Junto a la noria
Un árbol grande
Como tu gloria
Y muchas rosas
Para ti.
  
He pedido al canario
Y ala paloma
Lleven tu nombre
Al campanario
Y así se oiga
Más allá.
Yo llevo grabada
Aquí en mi pecho
La melodía de tu voz
Y tú desvelo
Junto a mi lecho
Y la caricia de tu amor.

Para escribir tú nombre
Yo necesito
Miles de rosas
Y agua de mi alma
Porque eres madre
El amor.

Mi mamá y mi esposa Carolina. Julio del 2013.
Este año 2013, el domingo 7 de julio nos reunimos todos los que pudimos, hijos/as, nietos/as, bisnietos/as, para abrazar a doña Hilda y celebrar la alegría de su llegada a los 90 años. Yo aproveché para cantarle y entre varias canciones le dediqué "Como pájaros en el aire" (de Peteco Caravajal, argentino). Por momentos sentí que la voz se me quebraba... y estoy felíz de haber podido sentir esa emocion!
Aquí está la grabación:


¡Mi mamá y yo! ¡el día de sus 90 años!
7 de julio del 2013
¡Gracias por toda la vida doña Hilda!

Más fotos...

Mi hermano Hugo Mora, felicitando a mi Mamá a nombre de toda la familia!

Mi hermana Esperanza, mi mamá y mi hermano Hugo.

Mi hermana Guadalupe, mi Mamá y mi hermano Hugo.

Mis hermanos Rodolfo, Hugo, Guadalupe y mi Mamá!
Parte del familión de mi Mamá!