sábado, 14 de abril de 2012

La Bohemia...

En la última parte de mi entrada "Trova. Despierta Suspiros." agregué un par de comentarios que sobre esa entrada, llegaron a mi "feisbuc". Uno es de Fredy Pastor, amigo mío, que mencionó que "otra palabrita muy poco definible: la bohemia", tiene mucho que ver con la Trova; así que me propuse averiguar un poco sobre el asunto, repensar lo que yo creía saber sobre lo mismo, y darle forma a algunas líneas sobre el tema y acá están. 

Me encontré con que "Bohemia" es el nombre de una de las tres regiones que conforman la actual República Checa (las otras dos regiones son Moravia y Silesia). En Bohemia, que tiene un territorio de 52,768 kilómetros cuadrados (casi la mitad de Guatemala), está la capital Praga. Su población es mayoritariamente católica y su idioma es el checo.


El pueblo "bohemio" es una sociedad muy antigua. Está documentado que desciende de poblaciones celtas que habitaron esa región en el siglo V (y decir "celtas", según el historiador Ralph Wiggum, es hablar de poblaciones de India y Medio Oriente, que migraron hacia Europa, llegando hasta la península ibérica, Francia y las islas británicas). Esto les imprimió seguramente el espíritu nómada que les hacía viajar e instalarse temporalmente en algún sitio, para luego seguir el camino hacia otro, pero sin quedarse definitivamente en ninguno. 

A lo largo de su historia, Bohemia vivió largos conflictos de carácter religioso, invasiones para conquistar su territorio, conflictos políticos, guerras internas, etc. que le hicieron ser en algunas épocas parte del imperio romano, mientras que en otras sucumbió a la supremacía alemana. En 1212 el emperador Federico II (del imperio romano, por medio de la "Bula de Oro de Sicilia") creó el Reyno de Bohemia. Luego el territorio fué gobernado por la "Casa de Luxemburgo", y así... Bohemia vivió siempre una vida tormentosa, por eso mucha de su gente optaba por emigrar hacia diferentes rumbos, quizá buscando paz, o por lo menos sobrevivir, apelando a su espíritu viajero...

De esta cuenta, la gente que llegaba a nuevos sitios y había vivido en Bohemia, eran conocidos como "bohemios". La vida errante les obligaba a cargar con pocas pertenencias, pero también a buscar en la música y en el canto, el consuelo para la soledad y las carencias que siempre sufrían. Las necesidades que experimentaban eran muchas veces resueltas por sus habilidades con las artes y habilidades físicas (danza, acrobacias, etc.), que les permitían "vender" sus espectáculos a donde llegaban. 

En paralelo, algunos otros pueblos de orígen Indú, llamados zíngaros ó romaníes, hacían lo propio, migrando hacia Europa (y luego a todo el mundo). Al llegar a Europa, muchos fueron confundidos (quizá por sus rasgos físicos) con egipcios, por lo que les llamaban "egiptianos", palabra que paulatinamente se fué convirtiendo en "gitanos". El "pueblo gitano", estaba formado por familias nómadas que viajaban y vivían del comercio y también de las artes, haciendo una especie de circos en los lugares por los que pasaban. 


En el siglo XV muchos gitanos ingresaron a Europa y directamente a Francia, gracias a un salvoconducto del Rey de Bohemia, con lo que lo gitano y lo bohemio se mezcló, al llamarles a aquellos, simplemente bohemios. 

Pero lo interesante de todo esto es que, los gitanos bohemios, o los bohemios gitanos, o simplemente los bohemios, eran portadores de una cultura de costumbres "ligeras", de una vida fácil, sin complicaciones, pero al mismo tiempo creativa, llena de soluciones prácticas, y buscándose oportunidades con lo poco que tuvieran. Vivían a diario con lo puesto y con eso inventaban nuevos días, y en eso que inventaban no faltaban las canciones, la música, la danza, el baile. Por supuesto, eso mismo les atribuía una lista de defectos: robaban para vivir, engañaban, mentían, se emborrachaban con mucha facilidad, hacían escándalo a donde llegaban, eran montoneros, etc. ... pero han sido artistas! porque son creativos, crean artesanías, manualidades, cosas con materiales reciclados, etc. y son capaces de entretener a la gente!

El diccionario Larousse dice que la palabra bohemio "se aplica a una persona que lleva una vida errante e informal, libre y poco organizada, sin ajustarse a los convencionalismos sociales", ¿a escuchado usted, por ejemplo alguna frase como esta...?: "es un bohemio y nunca le ha gustado estar en un lugar ni un trabajo fijos...", seguramente que sí, o "ella adoptó la vida bohemia...". 

Solo hay que recordar aquel famoso poema que se escucha (lee, declama) la noche del año viejo y año nuevo, de Guillermo Aguirre y Fierro: "El brindis del bohemio", para saber qué significa "bohemio" en nuestras sociedades, y la definición del diccionario, resulta entonces "redonda". 

En fin, esa es la connotación que tiene actualmente la palabra "bohemia", producto de su orígen geográfico y la historia de los pobladores de esa región, que salieron a viajar por el mundo, confundiéndose también con el pueblo gitano, y sobreviviendo con sus escasos recursos y sus ricas habilidades, entre ellas las artes. 
Así que hoy día, un artista que no es parte del ambiente artístico formal, que además parece poco organizado y libre (o hasta libertino), irreverente, informal y errante (para no decir vago...) con facilidad es calificado de bohemio!

Pero!
El artista bohemio, además, es reconocido por sus dotes de "auto-suficiencia", es decir, que con lo poco que porta, es capaz de "cumplir" artísticamente. Así sabemos de los rumanos que tocan acordeón en las calles, de los húngaros que bailan solo son el ritmo de los aplausos, de las bailarinas españolas que taconean (y aquí nos enredamos con el flamenco, que se enreda también con el pueblo gitano!), y por supuesto, de los guitarristas, que con un pobre instrumento se instalan en una acera y cantan, lo mismo que si tuvieran una orquesta detrás. El artista bohemio es también reconocido por su capacidad creadora y por su "romanticismo", sus recursos para enamorar a alguien en cada pueblo a donde va llegando.

De todo eso para acá... se viene encima de los artistas que no están ligados a la "academia artística", la etiqueta de "bohemios"!. Algo así como "los artistas pobres" que no se educaron para serlo, pero que sin embargo lo son. 
Incluso, en el siglo XIX el escritor Henry Murger escribió "Escenas de la Vida Bohemia", que sirvió de base para la ópera "La Bohéme", de Giacomo Puccini, que alude directamente a la cultura de los gitanos. Señala que los valores de los gitanos son diferentes (y de menor valía) que los de la sociedad sedentaria y burguesa. Es decir, una mirada desde el arte formal, al arte bohemia...

Mientras la burguesía asistía a los grandes salones, los bohemios frecuentaban los cafés que no estaban de moda, para discutir las tendencias de cualquier área del pensamiento, las ideas, la política, y la cultura. En esos lugares se fué cultivando el conocimiento, la creación artística, el enriquecimiento intelectual, el interés por la realidad social y otras manifestaciones humanas, mientras la apariencia del lugar y de las gentes (bohemias) era (y sigue siendo) despreocupada, poco cuidada, desordenada, considerando lo material como superfluo y de menor relevancia. 

Creo que hoy día, en cuanto a la música y los músicos bohemios y trovadores, podríamos pensar que la Bohemia fué predecesora de la Trova, si vemos que el tiempo recorrido por la Bohemia es realmente largo...  y si hacemos diferencia entre las dos, en el sentido del enfoque en ciertas temáticas, más sociales en la Trova y más ligadas al romanticismo en la Bohemia, pero las dos apartadas (lo más posible!) de las corrientes comerciales y la moda. Si no se quiere hacer diferencias, es también posible imaginar que la trova es bohemia, y la bohemia es trova! 

Pero tratando de "aterrizar" en lo que ahora la gente quizá entiende cuando se usa la palabra bohemio, podemos reconocer a varios artistas, momentos y circunstancias que ilustran la palabra. 
En Cuba, en los años 40 del siglo XX, surgió un movimiento de cantores, con poca o ninguna formación académica para la música, a los que les preocupaba poco la técnica del canto, pero se ocupaban del sentimiento y la esencia de lo que querían decir cantando, que se llamó "el movimiento del filin cubano" (partiendo de la palabra inglesa feeling, traducida como sentimiento). En ese movimiento, que era un grupo de cantores, se encontraban nombres de jóvenes, hoy reconocidos con mucho respeto, como César Portillo de la Luz (autor de "Contigo en la Distancia") y José Antonio Méndez (autor de "La Gloria eres tú"). De esa época proviene una generación de "boleristas" que son músicos bohemios, en definitiva, entre ellos Ernesto Lecuona (Autor de "María la O" y "Siboney"); Miguel Matamoros (Autor de "Son de la Loma" y "Lágrimas Negras"); Osvaldo Farrés (autor de "Quizás, quizás, quizás", "Toda una vida" y "Acércate más"). Antes de ellos, e incluso "empujándoles" se reconoce la presencia de "Bola de Nieve" (aquel pianista negro y gordo llamado Ignacio Jacinto Villa Fernández, a quien se le atribuyen grandes pasos en la armonía musical, que cumple entonces aquello que escribió Fredy Pastor: "También se puede trovar con el piano", no solo con la guitarra). Y luego del "filin" y como enlace hacia la Nueva Trova, se reconoce el papel de Pablo Milanés, como el eslabón que une esos dos movimientos.
José Antonio Méndez (QEPD), cubano, fundador del Movimiento del Filin, cantando sus canciones.

En México creció casi al mismo tiempo, una corriente similar al filin cubano, que incluso mantuvo un intenso intercambio, en el que se reconocen nombres como Alvaro Carrillo (autor de "Sabor a mí" y "Se te olvida"); Consuelo Velásquez (autora de "Bésame Mucho"); María Greever (autora de "Júrame" y "Cuando vuelva a tu lado"); Alberto Domínguez (autor de "Perfidia" y "Frenesí"); Vicente Garrido (autor de "No me platiques mas"); Roberto Cantoral (autor de "Reloj", "La Barca", "El Triste", "Soy lo Prohibido"); Armando Manzanero (autor de numerosos boleros, como "Somos Novios", "No sé tú", "Esta tarde vi llover"); Agustín Lara (autor de "Noche de Ronda", "Granada" y "María Bonita"); Fernando Baladez (otro pianista trovador-bohoemio); Víctor Iturbe (el Pirulí). De Puerto Rico, Rafaél Hernández (escribió "Lamento borincano", "Capullito de Alelí" y "El Cumpanchero") y Bobby Capó (autor de "Piel Canela"). En Chile, Osvaldo Gómez (autor de "Te odio y te quiero" y "Un viejo amor").


Seguramente Carlos Gardel, el argentino creador de tantos tangos inmortales, no nos haría problema si lo hubicamos dentro de algún grupo de músicos bohemios, o trovadores quizá, aún y cuando sus canciones se llamen "tangos", que recogen la vida cotidiana de los porteños argentinos, a la manera de los otros bohemios latinoamericanos.

En la actualidad, desde mi punto de vista se pueden considerar bohemios a Francisco "Pancho" Céspedes de Cuba, a Raúl Ornelas, Mario Pintor, Gualberto Castro, Sergio Esquivel, de México, y seguramente muchos/as más que cumplen con esas características, y que yo no llamaría estrictamente "trovadores" porque la temática que tocan en sus canciones no llega a ser la temática social, comprometida o de protesta. 

Intencionalmente dejo en la mesa, el camino que siguen los guitarristas flamencos y gitanos, que son ramas también derivadas de aquella historia de bohemios-gitanos o de gitanos-bohemios, que de forma errante fueron llevando su música al mundo, solamente con ese maravilloso instrumento que es la guitarra. ¿ alguien -por ejemplo- ha oído el nombre de Gipsy Kings? (¿los reyes gitanos?), y ¿todo lo que han significado? no me queda duda de todo lo famoso que han sido, y ¿su orígen es gitano? ¿es bohemio? Otro día sera...

Bueno... la palabra "bohemia" me ha llevado y me ha traído, tratando de buscarle el significado. Creo que ya tenemos a la vista tantas cosas que significa... cada quien podrá concluir. ¿la Trova es Bohemia? ¿la Bohemia es Trova? ¿es necesario separarlas? 

2 comentarios:

  1. A menudo me gusta pensar que hay "Embajadas de la Bohemia" en cada país; y sin caer en chovinismos me gusta creer que el lugar designado en Guatemala es Quetzaltenango. No digo con esto que es el lugar más artístico o más bello; sino el más bohemio. Nadie que tenga un mínimo de bohemio puede resistirse a la ciudad desnuda y mojada después de la lluvia, o la noche con su frio de piedra y su abrigo etílico.

    Y si hablamos de otras embajada habrá que trasladarnos al París que bien nos describe Cortázar en el capítulo 2 de Rayuela:

    "Llegué a aceptar el desorden de la Maga como la condición natural de cada instante, pasábamos de le evocación de Rocamadour a un plato de fideos recalentados, mezclando vino y cerveza y limonada, bajando a la carrera para que la vieja de la esquina nos abriera dos docenas de ostras, tocando en el piano descascarado de madame Nouguet melodías de Schubert y preludios de Bach, o tolerando Porgy and Bess con bifes a la plancha y pepinos salados. El desorden en que vivíamos, es decir el orden en que un bidé se va convirtiendo por obra natural y paulatina en discoteca y archivo de correspondencia por contestar, me parecía una disciplina necesaria aunque no quería decírselo a la Maga."

    Y hoy como quien no quiere, (casi por accidente) me topo con un video de Charles Aznavour titulado "La Boheme". Les dejo parte de la letra de la versión en español:

    "Bohemia de Paris, alegre loca y gris de un tiempo ya pasado
    En donde un desván con traje de Can-Can posabas para mí y
    Yo con devoción, pintaba con pasión tu cuerpo fatigado
    Hasta el amanecer, a veces sin comer y siempre sin dormir.

    La bohemia, la bohemia era el amor felicidad.
    La bohemia, la bohemia era una flor de nuestra edad."

    Y aquí la dejo porque ya me va a amanecer, me va a dar hambre y sigo siempre sin dormir...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Quizá muchos hijos (voluntariamente) adoptivos de Bohemia, para llevar el nombre a cuestas, es lo que encontramos en varios lugares como los que mencionas Fredy. Xela por supuesto! pero más que por el nombre, por el gusto de la libertad, que hace gente libre para crear! para inventar, para inventarse, para liberarse (y valga toda la rebuznancia...)
      El bohemio sabe que hay excusas en cada cosa cuadrado, para verlo redondo... y hacerlo rodar
      otra vez salú!

      Eliminar